2 de julio de 2025

Otro documento de gran valor



No tenemos data de este carnet del Centro de Egresados y Ex Alumnos del Joaquin V Gonzalez.

Hasta donde pudimos adivinar, el troquelado comprobante de pago de cuota aparentemente indica que es del año1969 coincidiendo cona otra publicacion similar de marzo del 2010, aunque el diseño del carnet es distinto.

El escudo de 5to 3ra TM de la Promo'69


 

1 de julio de 2025

El Atribulado Catalán

Escuela de Comercio Nº 1 "Dr. Joaquín V. González" (I)


Introducción:

"Llega un momento en la vida, que uno avanza a paso más lento, y además mira hacia atrás, para recordar, sobre todo, de dónde viene y cómo ha llegado hasta aquí… Cómo ha recorrido ese camino y con quién lo ha recorrido… En ese camino, en el que se han ido quedando lugares, establecimientos, instituciones, empresas y personas… personas, de las que nos hemos alejando o se han alejado, por diversas causas… desde el hecho de no compartir nada o poco con ellas, hasta aquellas que la vida nos ha llevado por caminos diversos, a pesar de compartir mucho… Caminos diversos y tiempo, es una combinación especial, que hace que hoy uno no sepa dónde están ni lo que hacen, aquellos con los que un día, se ha compartido mucho de la vida…

Sin embargo, ahora, que los hijos han crecido y se han ido, y que la profesión ya no es acuciante, y que además de caminar y correr en pos de objetivos de vida personales y profesionales; ahora, que tenemos un tiempo más reflexivo, ahora es el momento de mirar hacia atrás, no con la nostalgia de que todo tiempo pasado ha sido mejor, sino con la nostalgia de intentar volver a encontrar a parte de aquellos que compartieron parte del camino…

Por eso, ahora me he puesto en campaña, para buscar a mis antiguos compañeros de la escuela secundaria, y algunos de ellos, buenos amigos en aquellos tiempos  e incluso años después… Es una forma de ir cerrando una línea, para llevarla al círculo…

Lamentablemente, ni Buenos Aires en particular, ni Argentina en general han avanzado en estos más de 40 años, y la consecuencia de ello, es que instituciones como nuestro colegio, es que tampoco avanzara.

Nuestra generación ha vivido, una etapa muy dura, variada y complicada, desde el punto de vista social y político. Por ello, supongo, que no será fácil la búsqueda…  Accedimos a la escuela secundaria en pleno gobierno militar, y finalizamos la escuela secundaria, con otro gobierno, pero también militar… Iniciamos la universidad en la misma forma, hasta 1973, que llegó la democracia revisionista, y con lucha de grupos guerrilleros de montoneros, erp, etc., produciéndose una especie de “autogolpe” en 1974, que sin acabar con el gobierno, sí llevó a unos cambios drásticos, que terminarían con el golpe militar en marzo de 1976, cuándo aun no habíamos acabado la universidad… ¡tiempos muy duros, difíciles y cambiantes!

No existe una asociación de ex alumnos oficial, ni tampoco, pareciera que interés por parte del colegio de crearla o ayudar a que surja y pueda aglutinar a miles de estudiantes que durante tantos años han pasado por sus aulas… ¡Lástima que no se haya hecho!, pero aún no es tarde, y desde aquí, hago un llamamiento a mis condiscípulos y a la propia dirección del colegio, que nos pongamos en marcha…"


Prolegómenos del 1er año

"Era un mes de marzo de 1967, y el verano tocaba a su fin. Con 12 años cumplidos, previo examen de ingreso, comenzaba mi etapa de estudiante de escuela secundaria…  Recuerdo aun,  el día que hice el examen de ingreso, al salir, me esperaba mi padre, como siempre sereno y tranquilo, aunque tal como me preguntó, la procesión iba por dentro…

No había transcurrido un año todavía de  nuestra llegada al puerto de Buenos Aires, una mañana de abril, cuando miraba la entrada del barco en puerto, desde la proa, con ojos de niño, con sensaciones de ansiedad, alegría e inquietud, iba de aquí para allí, y en una de esas, logré manchar mi pantalón de tergal, con la línea de planchado perfecta, (¡no podía llegar de cualquier forma a encontrarme con mis tíos)! Llegaba a la que sería mi ciudad, durante más de 13 años…, dónde maté a la niñez, viví mi adolescencia y mi primera juventud…

Tenía un poco más de 11 años, y un deseo irrefrenable de ver, de tocar, de sentir y de vivir en un mundo distinto y nuevo, del que dejaba atrás… De un pueblo pequeño a una gran ciudad… De un inicio del desarrollo, al desarrollo (eso se suponía)… Mis ojos iban de un sitio a otro, de los galpones y la suciedad del puerto, a la ciudad que más allá se veía, y más se presentía…

Ese mundo, que desde muy pequeño, mientras que cuidaba a las vacas en el monte, veía como el sol desaparecía en el horizonte, y soñaba y me ensoñaba con algún día alcanzar ese horizonte… Allí dónde el sol se acostaba, allí quería ir…

Comencé por dejar la aldea e irme a la villa de Carballo… Colegio nuevo, compañeros y amigos nuevos, tanto en clase como en el barrio… así pasaron 4 o 5 años, hasta que un día, mis padres me preguntan sobre ir a Buenos Aires… esa ciudad, de la que mi tío, hablaba maravillas, de ese país tan lejano y tan atractivo para un niño deseoso de nuevos mundos…  Ahí comenzó la emigración, preparando durante meses el viaje, mientras mi padre, trataba de rentabilizar el tiempo, trabajando unos meses en Francia primero, y luego en Holanda…

Esa mirada de niño, cambió muy rápidamente para siempre; mientras esperaba que mis padres hicieran los trámites para pasar la aduana, me dejaron a cargo de todo el equipaje… y, en ese ínterin, alguien birló un par de cosas del baúl, aun abierto para la inspección…

Pero, todo eso es otra historia, que quizá, en otro momento, me anime a desarrollarla… Ahora estábamos en marzo de 1967, y mi inicio en un nuevo colegio, y una nueva responsabilidad, ya que comenzaba la escuela secundaria, y de ahí saldría a no sabía dónde…

Había elegido Comercial, sin saber muy bien porqué, ya que en realidad, siempre había dicho que quería ser ingeniero, sobre todo cuando el cura de la aldea, intentaba convencer a mi padre y a mí mismo, para que fuera al seminario… Si lo hubiera hecho, posiblemente me hubieran echado el primer año… elegí Comercial, dentro de tres posibilidades, una de ellas era Industrial, y la otra era Bachillerato (nacional)… El mejor colegio de Industrial me quedaba muy cerca de casa, el de nacional también, y el de comercial me quedaba más lejos, que, lógicamente requería viajar en colectivo (autobús)… y ahí me fui… como siempre, haciendo lo más difícil…

Solo tomé la decisión, posiblemente mi tío haya ayudado algo, pero todo lo hice solo. Ir a averiguar, preparar el examen de ingreso… solo, recorrí media ciudad, para al final acabar en la Escuela de Comercio Nº1 Dr. Joaquín V. González… y, en ese mes de marzo de 1967, entré por  segunda vez al edificio, pero esta vez como alumno, a ver que me deparaba la vida… Era temprano, las clases comenzaban temprano… y, entrar, significaba pasar al patio, y formar en filas, tipo servicio militar, según la división que nos habían designado, y con el preceptor –cuidador, vigilante, primero, y más tarde alguno amigo-, y luego de ahí, al aula que nos correspondía… Y, esa misma rutina durante los próximos 5 años…

Al aula, y así fueron apareciendo los profesores del día, y durante la semana, los fuimos conociendo uno por uno, y anotando las exigencias que cada uno tenía para su asignatura… Castellano, Botánica, Matemáticas, Geografía, Historia Antigua, Educación Democrática, Contabilidad, Caligrafía, Inglés, Música…

Todos éramos distintos, pero el único diferente era yo… mi acento me delataba… y, ya había pasado por aquello, durante los meses pasados, en el Colegio San Francisco, con mis compañeros… el gallego, el gallego pata sucia… las risas por mi acento… y, además del acento español clásico, el mío estaba acentuado por el gallego, así que por lo tanto, traté de tomármelo con una cierta calma y llevarlo lo mejor posible…

En menos de un año, había cambiado toda mi vida, de segundo año de bachillerato en España, había pasado (unos meses) por el 7º grado en la primaria, y luego al primer año en la secundaria en Buenos Aires…  De las matemáticas financieras, a la matemática moderna (Teoría de conjuntos), del francés al inglés, y de mis compañeros de juegos y de clase en mi pequeño pueblo, a mis compañeros nuevos  en una ciudad inmensa. De una casa con finca y frutales, a una habitación con derecho a cocina, en un cubículo de 3 m2 como máximo… baño compartido por tres familias a 10/15 metros… ¡qué frío se pasaba en invierno!!!

Así comenzó mi historia en el Joaquín V. González y todos sus componentes: Rectorado, profesores, preceptores y compañeros… La historia de 5 años, con sus altos y bajos, con amigos y no tan amigos… Ha sido una historia intensa y cuyo balance ha sido muy positivo, para aquél niño con acento “raro”, tímido, y a veces incomprendido, pero que supo sobreponerse a todo eso, con ayuda de algunos profesores, de compañeros que se transformaron en amigos con el transcurso del tiempo… No sólo conseguí conocimientos, conseguí amigos, conseguí una educación, y una metodología de rigor (que ya llevaba, pero más rígida) que más tarde me sería muy útil…

No todos  siguieron en la mañana, ni en el mismo grupo, ni siquiera en el colegio,  durante los cinco años, alguien se fue quedando… y también añadiendo…"

BUSCADOS

Algunos compañeros de 1er año 6ª división:

Riquelme, Daboul, Khalil, Carlos Murakami, Iparraguirre, Héctor Lijo, Tonelli, Roberto Jorge Soto, Arza, J.A. Fernández, Norberto E. Cánepa, A. Rodriguez, S. Riquelme, Roberto Dopazo, Tonelli,  Luis Zambrano, Norberto D. Couso, Juan C. Cincootti, Borneana, Enrique Espinosa, Ricardo Sacchi, M. Iglesias, Premozzi, Mangioni, Carrizo, Jorge Luiz Calvinho.


Algunos compañeros de 5º año: 

Alberto Ledesma, Enrique Espinosa, Roberto Dopazo, Legazpi, Juan Carlos Altounián, Mangioni, Magnoni, Jorge Gambedotti, Fabián?, Gargiulo, Bacigalupo, Nequeckaur, Cottarello…


Si tú eres uno de ellos, y te interesa, ponte en contacto conmigo, y ver si podemos ir reunir a la máxima cantidad posible de compañeros de aquellos años...